Para mi propuesta final de
una actividad para trabajar el recurso elegido por mi grupo, El mar a rayas, he decidido elaborar una
actividad propia, que he denominado Mi
libro de literatura, en la que se vean reflejados algunos de los aspectos
que he ido trabajando y publicando en nuestro blog. Es por ello por lo que mi
actividad pasa a ser una “gran actividad”, ya que cuenta con dos actividades,
“Mi cuento” y “Mis adivinanzas”, divididas en tareas en las que trataremos el
texto desde diferentes puntos de vista. Ambas actividades presentan una estructura similar, dividida en tres
fases: primer contacto, fase principal y fase de síntesis. Estas dos
actividades se reflejarán en un libro titulado como la gran actividad propuesta:
“Mi libro de literatura”. Además, añadiré al final de esta propuesta otras dos
alternativas que trabajan el recurso elegido de una forma más breve.
Gran actividad: Mi libro de literatura
Actividad 1: Mi cuento.
Tarea 1: División del cuento en escenas.
Tarea 2: Dramatización.
Tarea 3: Fabricación de “Mi cuento”
Actividad 2: Mis adivinanzas.
Tarea 1: Descripción.
Tarea 2: Rimas enigmáticas
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“Mi cuento”
En primer lugar, en la actividad con
la que comenzaremos, denominada “Mi cuento”, las tres fases de las que he
hablado se corresponden con tres tareas, la primer consiste en la diferenciación
de escenas, la segunda de dramatización y por último una de secuenciación de
escenas. Tras varias lecturas de esta historia, el alumnado estará preparado
para realizar la primera tarea de esta actividad: división del cuento en
escenas. Con esto se pretende comenzar a interiorizar la diferenciación e
interiorización de las partes de una obra.
Una
vez hecha la división por el alumnado, organizando la clase en tantos grupos
como escenas se hayan diferenciado, procederemos a la dramatización de una
escena por cada grupo. Para ello aportaremos objetos como periódicos, ramitas,
etc. que los niños podrán utilizar en sus dramatizaciones como objetos
simbólicos. Planteo esta tarea con el objetivo de conseguir el enriquecimiento
de la expresión oral así como el desarrollo de un recurso expresivo diferente a
este la expresión corporal. Además, la creatividad será un factor importante a
desarrollar en esta tarea debido a su carácter libre y simbólico. Les
ofreceremos un espacio libre de condicionamientos.
Por
otro lado, considero que la dramatización aporta muchos más beneficios como
pueden ser la autonomía en actividades habituales, la expresión de sentimientos,
emociones e ideas o el trabajo sobre la identidad a través de una pedagogía de
la escucha y el diálogo en la que intercambiar experiencias. Gracias a estas
experiencias y a la interacción, entre iguales en este caso, la interpretación
y la expresión que se requieren para la representación contribuirán a la
recreación cultural e interpretación del mundo. Todo ello favorece la
sensibilización estética a través del juego puesto que precisa de la comprensión
y por lo tanto del establecimiento de relaciones para extrapolar un personaje
al mundo de ficción del juego.
Durante
el desarrollo de la dramatización la docente tomará fotografías de cada escena
que después imprimirá tantas veces como número de niños y niñas haya en el
aula. De este modo ya tendremos el material necesario para la tercera tarea de
esta primera actividad. Junto a estas fotografías necesitaremos libretas hechas
con cartulinas, por ejemplo, que servirán como soporte para pegar las imágenes
de forma ordenada al gusto de cada niño o niña para así formar su propio cuento
añadiendo los detalles que vean convenientes.
Como
objetivo principal de esta actividad podríamos destacar el hacer de la
literatura algo propio que podemos trabajar y con lo que poder disfrutar solo/a
o en compañía, aunque en la segunda actividad también se persigue esta meta.
“Mis adivinanzas”
Para comenzar la segunda actividad, “Mis adivinanzas”, se
requiere que el alumnado sepa identificar los elementos y personajes más
característicos de la historia.
Ofreciéndoles
el cuento para que lo puedan manipular y así ver libremente los dibujos de los
elementos y personajes de la historia, en pequeños grupos, cada niño o niña
elegirá un elemento que será el objetivo de su adivinanza. Seguidamente, tras
explicar que la adivinanza es la descripción de algo sin decir qué es,
dejaremos a los alumnos que prueben a inventar una para que sus compañeros la
adivinen. En esta tarea podemos ver reflejados los conocimientos y experiencias
previas de los niños/as en las que nos basaremos para la siguiente tarea.
He
elegido trabajar con las adivinanzas por considerarlas como una herramienta de
interpretación del mundo a través del lenguaje, ya que la cultura y la
literatura están mediatizadas por el lenguaje. Del mismo modo, se presenta la
adivinanza como un elemento literario sociabilizador a través de la transmisión
de retahílas.
Una
vez que los niños y niñas hayan experimentado con esta tarea se pondrá un
ejemplo de adivinanza destacando la sonoridad y alguna metáfora o comparación enigmática.
Después, dejaremos que prueben de nuevo a hacer una descripción pero esta vez
intentando que tenga rima o algún elemento más enigmático.
Un
ejemplo que puede aportar la docente es:
“Verde
como la hierba, sobre el televisor se encuentra”
Como
material de apoyo para las adivinanzas les ofreceremos plastilinas de colores
con las que puedan modelar el objetivo de la adivinanza de modo que desarrollen
habilidades y procedimientos a la vez que experimentan con otro tipo de
expresión de sus ideas: representación de algo codificado (función simbólica).
Con
esta segunda actividad pretendo acercar las adivinanzas al alumnado con el
objetivo de que sea un primer paso para aproximarlos al mundo de la poesía.
Esto en todo momento se realiza desde el juego y la dinámica libre para seguir
desarrollando los objetivos nombrados en la actividad anterior. La intriga que
en todo momento se acrecienta contribuye a la apreciación estética y al interés
por el juego.
Como
mencioné anteriormente, estas adivinanzas también se recogerán en la libreta de
cartulinas utilizada para la actividad anterior en un apartado denominado “Mis
adivinanzas”. Para plasmar las
creaciones de los niños utilizaremos un código que acordemos entre todos de
forma parecida a los pictogramas, de forma que un círculo grande signifique
“grande”, un círculo pequeño signifique “pequeño” y un garabato de color verde
signifique verde.
Aspectos generales
Todos
los libros realizados por cada alumno tendrán un lugar en la biblioteca del
aula o en la del centro con el objetivo de que sean libros compartidos con el
resto de compañeros y puedan volver a consultarlos cuando quieran.
Considero
que la consecución de los objetivos generales que se pretenden son de diversa
índole. En primer lugar, con la dramatización, además de los aspectos que
mencioné anteriormente, se va desarrollando la expresión corporal y el
conocimiento propioceptivo a través del movimiento y del juego, elementos
claves en el desarrollo y el aprendizaje. Con esta tarea, además, el alumnado
acepta varios roles, interiorizando así normas sociales y valores.
En
ambas actividades se trabaja en todo momento la expresión oral, por lo que se
enriquecen multitud de aspectos relacionados con esta como puede ser el
vocabulario.
El
hecho de que sean los alumnos y alumnas los que participen de forma activa en
el desarrollo de las actividades fomenta su autonomía y autoestima, dotándoles
de iniciativa y espíritu emprendedor a la vez que se favorece principios de
índole colaborativa y cooperativa. Se trabaja la ética del encuentro a través
del respeto y la comprensión de las diferencias y la diversidad, así como los
prepara para la convivencia social y el desarrollo de su identidad. Que esta
metodología se utilice en el caso de la literatura considero que fomenta un
acercamiento a esta mucho más vivencial, haciéndolos partícipes y ofreciéndoles
la oportunidad de transferirlo a contextos de su vida cotidiana.
También
he querido incluir la biblioteca en mi actividad ya que estimo que fomentarlo
desde edades tempranas es muy positivo para tomarlo como hábito educativo y
extrapolarlo al contexto familiar y cotidiano. Asimismo, he decidido
introducir recursos más actuales como es el uso de las nuevas tecnologías en el
caso de la fotografía y la impresión para promover un uso adecuado de las TICs.
Por último, si nos centramos en la materia que nos ocupa,
la literatura, podría afirmar que estas actividades ayudan a alcanzar las metas
intrínsecas de este arte. Siguiendo una dinámica como la defendida a lo largo
de este trabajo, el alumnado descubrirá la lectura, así como el teatro, la
poesía, las adivinanzas, etc., como una experiencia agradable respaldada por la
afectividad transmitida por el adulto guía. Promover la práctica y el gusto por
leer, de aprender y de conocer y utilizar los recursos disponibles creará en
los niños y niñas un considerable aumento de conocimientos, vocabulario,
comprensión, creatividad e imaginación.
A continuación me gustaría añadir de forma
muy breve otras dos propuestas de actividades con las que trabajar el recurso
escogido.
Actividad 1:
Esta propuesta de actividad consiste en
imitar a los personajes del cuento o utilizar de forma simbólica un objeto
destacado de este. Las pautas que indicarán qué deben usar o a quién deben
imitar estarán recogidas en forma de tarjetas dentro de un calcetín, objeto
guía de la historia del cuento. Aleatoriamente se irán cogiendo tarjetas para
que por turnos cada alumno imite a un personaje o utilice un elemento
simbólico; el resto de la clase deberá adivinar de qué se trata.
Actividad 2:
Actividad previa a la lectura del cuento. Se
van sacando de un calcetín diferentes tarjetas de forma aleatoria con el
objetivo de que los niños vayan inventándose una historia diferente a la que
posteriormente le leeremos, pero con los mismos personajes.
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